Trituramos las nueces y las zanahorias ya peladas.
Incorporamos todo a un bol grande donde junto con los 4 huevos.
Incorporamos también el aceite de oliva e integramos todo con una espátula.
Cuando esté mezclado, añadimos el azúcar (normal o morena), una cucharadita de canela molida, media cucharadita de jengibre y media de nuez moscada. Batimos todo con varillas eléctricas hasta conseguir una mezcla homogénea.
Una vez esté bien mezclado, incorporamos la harina tamizada, junto a los dos sobres de gasificante (dos de bicarbonato y dos de acidulante). Incorporamos la harina a la mezcla con movimientos envolventes de arriba hacia abajo, y añadimos una pizca de sal.
Una vez precalentado el horno a 170ºC, ponemos papel vegetal en el fondo del molde para facilitar después el desmoldado y engrasamos los laterales.
Vertemos la mezcla en el molde y lo horneamos durante 40 minutos, comprobando con un palito si el bizcocho está bien cocido.